En Wellington, Nueva Zelanda es habitual que muchos bares y cervecerías elaboren su propia cerveza, tal vez porque en el país hay muchos productores de lúpulo, se pueden encontrar muy buenas cervezas artesanales.
Un ejemplo es la pequeña cervecería Garaje Project dirigida por Pete Gillespie y Jos Ruffell con la ayuda del hermano de Pete, Ian. Como su nombre indica “proyecto garaje” es un proyecto que empieza en un garaje. Un trabajo en proceso y la idea es que siempre sea así, innovar, experimentar y producir diferentes estilos de cervezas, reinterpretarlas en lugar de desarrollar una carta fija.
La elaboran a partir de ingredientes tradicionales, lúpulo y malta, pero experimentando y probando a mezclarlos con ingredientes nuevos. Producen pequeñas cantidades, barriles de 50 litros, al tratarse de lotes pequeños pueden permitirse el lujo de experimentar y probar cosas nuevas y que no sea un riesgo económico como si se tratara de grandes producciones.
Su potencial creativo e innovador se refleja en las etiquetas de los barriles y las originales latas de edición limitada que las convierten en piezas de coleccionista.
Matt Smith del estudio COMMON (http://www.commongoods.co.nz) ha sido el encargado de diseñar la fábrica de cerveza para Garaje project, la idea fue diseñar un bar de degustación, captando la atención en el exterior con el uso del color.
El interior el contraste de los azulejos pulidos con la calidez de la madera y pequeños detalles industriales que se complementan con la fábrica adyacente.
vía: http://garageproject.co.nz/