El hotel está situado entre la iglesia del Memorial, el Tiergarten Park y el Berlín Zoo. Fue precisamente la ubicación del edificio lo que inspiró el diseño interior que podría resumirse en la idea de crear una jungla urbana. Tiene 149 habitaciones; la mitad con vistas al zoo diseñadas con materiales cálidos y colores naturales. Mientras que la otra mitad con vistas a la ciudad y un diseño más urbano y un poco más áspero.Existen otros espacios que hacen diferente este hotel, una panadería propia que hornea cada día, zonas donde relajarse y escuchar los DJ´s que pinchan durante todo el día, salas de reuniones y una sauna de la selva en el noveno piso.
Por último en el décimo piso una gran terraza con vistas panorámicas de la ciudad y muchas cosas que hacer, el restaurante NENI y el bar Monkey mezcla ecléctica de cocina del mundo.
Los mundos escalonados permiten el refugio de la jungla urbana y ofrecen la individualidad y la sostenibilidad.
Vía:
http://www.25hours-hotels.com
http://www.aisslinger.de